lunes, 2 de marzo de 2020

Casi Idéntico

Y ella finge que se lo cree. Después de más de diez años de matrimonio por fin la mira con ternura, la acaricia apasionadamente. Le dice cosas que jamás le habría dicho: “Te amo desde el primer día en que te vi”, le susurra cuando le hace el amor como nunca antes. “Haría cualquier cosa por ti”, y ciertamente lo ha demostrado. Así que ella hace como que no sospechara nada, total, nadie más lo hará, de puertas afuera siempre fue el marido ideal. Sin duda ella sale ganando. Así que finge creer que es él y que en aquel extraño accidente el que murió fue su gemelo.

lunes, 16 de diciembre de 2019

Mentes Enfermas

Fui a visitar a mi padre y le confesé lo que había hecho. Necesitaba desahogarme y sabía con certeza que él nunca me delataría. El horror se iba reflejando en sus ojos vidriosos a medida que le describía los detalles más truculentos hasta que, como esperaba, su expresión mutó en un instante del espanto y el asco a la tranquilidad más absoluta. Ya lo había olvidado. Con la mirada perdida preguntó: ¿nos conocemos de algo?

lunes, 9 de diciembre de 2019

Pucheros

Se me acumulan los garbanzos por los rincones de la casa. Cuando busco el mando de la tele aparecen entre los cojines del sofá. Los niños ya los aborrecen, lo sé, sin embargo los comen sin rechistar, poniendo la mejor cara. He empezado a regalárselos a los vecinos, que responden agradecidos a mi risa forzada. A veces los escondo debajo de la alfombra. Y cuando vuelves a casa, me quito la sonrisa y vuelven a brotar, secos, de mis ojos.

miércoles, 19 de junio de 2019

Monstruos, Sapos y Culebras

Reconozco que soy de fácil preocupar. Me viene en la sangre, qué le voy a hacer. Que le pregunten a mi padre, o a mi abuela. Tanto es así, que últimamente las preocupaciones me han empezado a salir por los ojos. Literal. Puedo llegar a transformarme en una suerte de ser que oscila entre el lagarto humano, el zombi y algún anfibio abisal desconocido hasta ahora. Literal también. ¡Y si no que le pregunten a mis alumnos, que en pleno abril me preguntaban que por qué narices iba de Halloween! Así que desde aquí os recomiendo que no mezcléis ralladuras de cabeza con alergias varias porque puede desencadenar en efectos no deseados. El caso es que ahora tengo que tener cuidado con lo que como, lo que bebo, lo que me echo, lo que utilizo para limpiar… así que entre otras cosas, por ejemplo, me he pasado al aroma natural, que según para qué cosas tiene sus ventajas pero que en ocasiones (especialmente ahora en verano) me obliga a mantener los brazos bien apretados para abajo. Estoy contenta porque estos últimos días parece que estoy recuperando mis ojos de siempre. ¡Que dure, que dure!

El toque cutre del papel pautado da fuerza a la idea que trataba de transmitir 😁




jueves, 13 de junio de 2019

Baila

Baila con todo tu cuerpo, desplegando tu esencia en cada cadencia, en cada movimiento. Como cuando estás sola, como si nadie mirase. Entrégate a la música y déjate salir, sin que importe nada más. Sonríe a la niña que llevas dentro y acompáñala de la mano en tu danza. Intenta bailar y vivir de igual manera.


martes, 11 de junio de 2019

Cosas de la Vida Moderna

¿Me llamarán para que baje a cenar en familia?, se preguntaba. Miraba al reloj de forma instintiva, sin poner atención a la hora. Recién duchada y con ropa limpia, esperaba sentada a los pies de la cama, controlando el nervioso movimiento de sus piernas, secándose las manos en la falda. Su corazón se aceleró al oír los pasos subiendo por las escaleras. Con una sonrisa resplandeciente recibió a su hija, que con desdén le dejó una bandeja en la mesilla de noche, diciendo: " Cuando acabes la dejas fuera”.
(Microrrelato ganador en la semana 31 de Relatos en Cadena)

lunes, 3 de junio de 2019

Miembros Fantasmas

-¡Ya tengo los pies fríos otra vez!- protestó entre risitas el primero, acomodando con aspavientos la manta sobre su regazo.
-¿Te quejas tú de tus pies? Yo no aguanto más la artritis de las manos- comentó otro en tono burlón.
-Pues no veáis a mí lo que me pica la oreja- dijo el último aguantándose la risa.
-¿Quieres que te la rasque?- preguntó el segundo. Y entonces los tres estallaron en carcajadas, contagiando, como siempre, a todos los demás.
Toda la residencia esperaba impaciente el momento de la merienda, cuando los tres viejitos amputados se juntaban a hacer de las suyas.